En el mes de diciembre hemos ido hasta Santa María de Ordás para hacer la ruta de Tierra de Ordás. Estuvimos unas treinta personas, un buen grupo. Partiendo del centro del pueblo caminamos hacia el noroeste cruzando la carretera y tomamos una pista que asciende por un valle hacia el norte. Avanzamos entre un bosque de robles.
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| Iniciando el camino |
La pista por la que avanzamos está seca y su pendiente es muy suave. El cielo está cubierto, pero no amenaza lluvia. La temperatura es fría, pero adecuada para caminar.
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| Carricoche para los más peques |
En algunos tramos el suelo está lleno de hojas de roble.
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| Avanzamos entre robles |
Después de caminar algo más de una hora llegamos a una zona llana y entramos en el pueblo de Villapodambre.
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| Llegando a Villapodambre |
Pasamos este pueblo y avanzando trecientos metros más llegamos a Formigones. Hacemos una parada delante de su iglesia curiosa por su original espadaña.
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| Ante la iglesia de Formigones |
Retomamos el camino y entramos de nuevo en un bosque de robles frondoso. Localizamos un lugar tranquilo donde paramos a comer.
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| La mayoría de los excursionistas. Falta alguno... |
Tras una comida tranquila y bien reposada instalamos un pequeño Belén montañero y cantamos villancicos.
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| Cantando villancicos |
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| Hasta tenemos la letra de los villancicos |
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| Belén montañero mínimo |
Tras los villancicos reemprendemos la marcha. Pronto dejamos atrás el bosque de robles y llegamos a una zona despejada con vistas muy amplias.
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| Dejamos atrás el bosque de robles |
A partir de aquí todo el camino es en ligero descenso. Esto hace la marcha más rápida y menos cansada.
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| Cuesta abajo, zona de brezo |
Durante la marcha la conversación es animada. Caminamos en pequeños grupos sin distanciarnos demasiado.
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| Camino en descenso |
Acabamos la pista y llegamos a una carretera que nos lleva hasta Callejo de Ordás. Desde aquí seguimos por carretera hasta llegar de nuevo al punto de partida.
Mientras los chicos juegan un rato en el parque nos despedimos de algunos que tienen algo de prisa. El resto nos acercamos después a la
Torre de Ordás. Se trata de una torre defensiva del siglo XIV, muy interesante.
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| Ante la entrada de la torre de Ordás |
La entrada está abierta. La Torre tenía cinco niveles. Hay una escalera interior alrededor del muro que permite llegar hasta el último nivel con cuidado. No apto para personas con vértigo. Las vistas al norte desde las ventas son espectaculares.
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| Interior de la torre de Ordás |
Desde aquí regresamos a los coches y cada familia a su casa. Una excursión muy agradable, con buena gente y muy buen ambiente. La última de este año.
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