En febrero hemos hecho la excursión de Trekking Familiar en el segundo domingo, como es habitual. Nos hemos ido hasta las proximidades de Geras para recorrer la senda de Celorio. Se trata de un recorrido bien marcado y conservado, con una historia y un toque cultural. Un kilómetro antes de llegar a Geras encontramos a la derecha de la carretera una zona para aparcar los coches. Pero hoy está casi lleno. Alguno tiene que aparcar el coche un poco más lejos, pero sin molestar.
Desde allí mismo parte la pista que asciende suavemente hacia el este por un valle. El inicio de la pista está en zona de sombra y hay bastante más nieve de la que esperábamos.
 |
| Iniciando la marcha entre la nieve |
Como estamos a la sombra, la temperatura es baja, pero bien abrigados no pasamos frío. Pisamos sobre unos cinco centímetros de nieve dura, se avanza bien. El cielo está totalmente despejado. Un día magnífico para una excursión. En cuanto salimos a una zona soleada hacemos la primera parada para reagruparnos y tomar algo. Hemos empezado muy tarde la marcha.
 |
| Seguimos avanzando sobre la nieve |
Seguimos la caminata. Ahora avanzamos bajo un sol bastante bajo, pero que calienta un poco y alegra la marcha. Poco a poco la nieve va desapareciendo. En algunos tramos encontramos algo de barro. Por el camino vemos otros grupos, menos numerosos, que hacen el mismo recorrido.
Pronto llegamos a unas praderas con vistas a la Peña Burero. Aquí encontramos una curiosa escultura. Una mano enorme sale del suelo apuntando al cielo. Allí hacemos una foto de todo el grupo... o casi.
 |
| El grupo ante la mano que apunta al cielo |
Desde aquí la pista sigue, casi sin pendiente, hasta el pueblo de Paradilla. En algunas zomas la pista tiene abundante barro, para evitarlo salimos por los prados colindantes.
 |
| Seguimos avanzando hasta Paradilla |
En unos minutos llegamos a Paradilla. Subimos enseguida hasta la Peña de la Iglesia, donde tenemos un mirador fantástico desde el que podemos ver el valle y las montañas que tenemos enfrente. Ante nosotros tenemos las laderas de Los Amargones y Traspenas parcialmente cubiertas de nieve.
 |
| Laderas parcialmente nevadas desde el mirador de la Iglesia |
En este mirador hay unas mesas adecuadas para comer. No hace viento y están al sol. Parece un lugar adecuado para comer. Y es la hora. Nos repartimos entre las mesas y tomamos el bocadillo.
 |
| El momento de comer |
Al cabo de un buen rato, ya acabados todos los bocadillos, empieza soplar una ligera brisa. Estamos en febrero, así que más bien brisa fría. Nos recogemos al abrigo de la iglesia, que mira al sur y protege del viento. Allí pasamos un buen rato de conversación, de siesta...
 |
| Al abrigo de la iglesia |
A todo esto, los más jóvenes descubren que en la ladera, detrás del pueblo, hay un enorme columpio. Vamos para allá. Todos probamos el columpio. Curioso, un columpio tan alto no permite grandes impulsos.
 |
| Columpio gigante |
Regresamos al mirador. No hay prisa. Tras un rato de conversación y descanso, retomamos la caminata. Bajamos por la carretera que sube hasta Paradilla. Al salir del pueblo una senda baja más directa al lado de un arroyo. Algunos, más tranquilos descienden por la misma carretera. Apenas circulan coches. El descenso por la senda es más emocionante y rápido.
 |
| Descenso por la senda |
La senda desemboca en la carretera de Geras. Casi en frente un puente nos lleva al otro lado del río. Esperamos a los que bajan por la carretera. Estamos de nuevo en zona de sombra y el suelo vuelve a estar cubierto de nieve.
 |
| Regresamos de nuevo pisando nieve |
Vamos avanzando por una senda que remonta el curso del río Casares. La mayor parte del recorrido es entre árboles pelados por el invierno. Se avanza sin dificultad por la nieve dura y con una pendiente muy ligera.
 |
| Avanzando entre la nieve |
En poco tiempo remontamos una ligera cuesta, cruzamos un arroyo y llegamos a la carretera.
 |
| La última pendiente de la excursión |
Unos metros más y estamos de nuevo en el punto de partida donde encontramos nuestros coches. Ya solo quedan los nuestros. Otro día de excursión muy agradable.
