 |
| La mayor parte del camino se hace con facilidad siguiendo la pista que conduce hacia el puerto de Piedrafita. |
 |
| Estos característicos "hitos" señalizan en varios puntos la pista que asciende hasta el puerto. |
 |
| La mañana transcurría apaciblemente, y la meteorología animaba a continuar la marcha sin reparos. |
 |
| Como se puede ver, también en esta ocasión éramos un grupo numeroso y con edades muy variadas. |
 |
| Conforme avanzamos, comienza a verse la zona de cumbres, con una cantidad de nieve respetable para las fechas en que estamos |
 |
| Llega el momento de hacer una parada y reponer fuerzas, ... |
 |
| ... o bien, de continuar jugando. |
 |
| Pero, por lo visto, algunos no se enteraron de que convenía aprovechar este momento para comer algo, y luego tuvieron que lamentarlo. |
 |
| Un poco más adelante, cuando hay que abandonar la pista que conduce al puerto, comenzamos a pisar algo de nieve, ... |
 |
| ... y parece que cada vez hay más. |
 |
| Pero la nieve no nos intimida, y continuamos subiendo, a pesar de que también ha comenzado a nevar ligeramente. |
 |
| Como estamos ya cerca de la cabecera del valle, sólo parte del grupo se anima a avanzar un poco más sobre la nieve, y el resto comienza el regreso. |
 |
| No sin dificultad, recorremos los últimos metros hasta aproximarnos a las cascadas que forma el Torío cerca de su nacimiento. |
 |
| Y, contemplando este hermoso paisaje, hemos de despedirnos y volver a toda prisa, puesto que las inclemencias del tiempo van en aumento. |
 |
| ¡A ver si en diciembre tenemos tanta o más nieve que hoy! |
