Con un día despejado y soleado como pocos, nos dirijimos al collado de Ubierzo para iniciar la excursión. Allí nos dimos cuenta de que uno de los coches se había despistado y no aparecía. Al no haber cobertura para los móviles, iniciamos la marcha para alcanzar algo de altura, y, por fin, contactamos con ellos y descubrimos que no se hallaban muy lejos: habían ido a recalar en Valdeteja.
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| Comenzamos a caminar desde Ubierzo. |
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Hacemos una parada junto a la Majada de Valdelasrubias,
para reponer fuerzas y esperar a los rezagados. |
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| Por fin, vemos llegar a los del último coche... |
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| ... y podemos continuar nuestra ascensión ya todos juntos. |
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Como siempre, los neveros siguen siendo
un punto de atracción para los más jóvenes. |
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| Disfrutamos de las excelentes vistas a todo el valle de Valdeteja, ... |
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| ... y continuamos subiendo, ... |
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| ... para luego atravesar Las Vizarreas. |
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Finalmente, las praderas floridas de los
puertos de Sancenas nos dan la bienvenida. |
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Mientras unos visitan el chozo
algún otro se pierde ladera arriba, ... |
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| ... y otros continúan la senda hacia la fuente ... |
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| ... sin dejar de divertirse con la nieve. |
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Tras probar el agua de la fuente de Sancenas, para abrir el apetito,
nos disponemos a comer, y alguno aprovecha para añadir
alguna mejora en la construcción hidráulica. |
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| Pero avanza la tarde y hay que ponerse de nuevo en marcha para regresar. |
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Pasamos por el Sumidero y subimos hacia el collado,
diciendo adiós a estos idílicos parajes hasta la próxima ocasión. |
